En este post te voy a contar los cuatro electrodomésticos en los que invertí antes de ser madre por segunda vez.

Hace ya más de un año que no escribo en el blog. Mas o menos coincide con mis últimos meses de embarazo en los que ya no podía con mi alma y con el primer año de Jaime, mi segundo hijo.
La única razón es la que hoy voy quiero contarte y no es más que la que todas y todos vivimos cuando nos convertimos en madres y padres.
La verdad es que antes de que naciera Jaime, Gonzalo, mi primer hijo, ya empezaba a ser más independiente. Entró en el cole, ya no utilizaba pañales, comía solo y más o menos nos apañábamos con lo que nosotros comíamos y eso me estaba dando más libertad, más tiempo y menos quebraderos de cabeza.

Y entonces llegó Jaime. Comidas para cuatro, lavadoras para cuatro, casa para cuatro, ropa limpia para cuatro, plancha para cuatro. Y aunque sólo sea una persona más, se nota mucho.
Me he llevado todo este año intentando readaptar nuestras rutinas sobre todo de comidas y limpieza. Es decir, buscando la manera de organizar los aspectos más básicos que me permitan vivir un día a día más desahogado y con menos carga mental.
Y no te voy a mentir, me ha costado. De ahí, que me hayas visto menos en redes sociales. Y te parecerá típico escuchar esto, pero no me daba y sigue sin darme la vida para dedicarme a otras tareas que no tengan que ver con mis hijos, pero sé, por experiencia que está etapa pasa. Sin embargo tampoco quiero que pase.

Yo quiero disfrutar del ahora con niños pequeños, no quiero esperar a que sean mayores para estar menos cansada.Por eso, siempre estoy dándole vueltas a la cabeza intentando mejorar mi vida para tener más tiempo de calidad para ellos, para mí, y para disfrutar en pareja.

Y ahora te defino lo que para mí es tener tiempo de calidad en este momento de mi vida. Para mí tener tiempo de calidad ahora es poder tener mi mente despejada, estar menos cansada, dormir bien, disfrutar con los niños sin pensar en cuantas lavadoras tengo que poner o en la comida que vamos a comer, llegar al final del día con un mínimo de energía que me permita tener ganas de cuidarme un ratito y ser feliz, muy feliz.

Claro, esto dicho así parece fácil pero depende mucho de cómo te organices, te planifiques y de la situación de cada familia.
La mía es esta. Vivimos en sevilla sin familiares cercanos a los que recurrir para cualquier imprevisto, para cualquier desahogo. Todo todo todo, lo hacemos mi marido y yo, no disponemos tampoco de ayuda profesional para las tareas domésticas .No hay nadie más a los que podamos meter dentro de nuestro sistema de organización y claro, el día a día se hace muy cuesta arriba a veces.

Por ello, valoro mucho la ayuda de electrodomésticos que al menos puedan quitarme alguna tareilla o me hagan más amenas otras para las que pierdo mucho tiempo. Quizás no me quiten las que menos me gustan pero si que puedo prescindir de hacerlas todos los días y ver mi casa limpia.
Igual que en alguna ocasión te he comentado lo importante que es que durante el embarazo sepas elegir los artículos más prácticos y que se adapten a tu rutina diaria, te digo también que es importante que valores la opción de incorporar a tu vida electrodomésticos que te hagan ahorrar tiempo y esfuerzo. Hagamos uso de esa tecnología que a día de hoy nos acompaña.

Por eso, a continuación te dejo los imprescindibles  en los que puse foco durante mi segundo embarazo:

1. Conga: ¡Que invento por dios! Ya podrían inventar algo para que te sacara la ropa de la lavadora y la tendiera. Yo estoy muy contenta con ella. Lo dejo siempre para el final, cuando me voy a recoger al mayor al cole la pongo y cuando vuelvo ya está el suelo limpio. La mía es la Conga 2290 de la marca Cecotec y limpia, friega y aspira, este modelo mapea, es decir, tú puedes configurarla para que haga el recorrido que tú quieras. En realidad, me hubiese bastado con el modelo básico pero cuando fuimos a comprarla no la había y la diferencia de precio tampoco era significativa así que me lleve esta.
La verdad es que se nota muchísimo, para mí un suelo limpio hace cambiar la percepción de la casa y aunque esta no esté del todo ordenada si el suelo está limpio se ve de otra manera. Te la recomiendo, esta de esta marca o cualquier robot aspirador con buenas referencias que sé que hay muchos.

2. Aspirador de mano sin cables: Hasta hace un año he estado utilizando una aspiradora con cable de estas en las que el depósito era grande y ocupaba muchísimo espacio. No sabía dónde meterla y me parecía incómodo tener que estar enchufando y desenchufado cada vez que cambia de habitación. Perdía mucho tiempo. Así que decidí comprarme una sin cable y en cuanto a prestaciones nada a destacar es una aspirada sin cables que aspira bien, con dos velocidades y que me permite ir de un lado a otro en menos tiempo. No tengo mascotas y no vivo en el campo por lo que tampoco me paré a pensar en si tenía o no prestaciones más potentes. La decisión de tenerla venía porque al comprar la conga para el suelo y deshacerme de la aspiradora con cable necesitaba una que llegara a sitios donde la conga no lo hacía y tenerla también para aspirar sofá, colchones, rincones etc. Y la verdad es que después de estar un año usándola recomiendo tenerla en casa.

3. Thermomix : No estaba yo muy decidida a comprarla, la verdad. Me echaba mucho atrás el precio. Una vez fui con una amiga a un taller de la misma marca y fue mi marido el que dijo” vamos a comprarla”. Con el trajín de los niños y la casa de todos los días comíamos mal. No nos daba tiempo a preparar la comida de uno,la comida de otro y la de nosotros. Y es cierto que nos gusta las comidas de cuchareo y la echábamos de menos. Ahora en junio hacemos un año con ella en casa y te comento mis impresiones para que tú también las tengas en cuenta.

  • El thermomix es un robot de cocina muy potente y aunque quedaría muy bien decir que otros de otras marcas no tienen nada que envidiarles no es así. En diseño sé que hay muchos que se asemejan pero pongo la mano en el fuego que en prestaciones y calidad no. No tengo ni idea, porque no los he probado todos obviamente, pero habiendolo probado y ver precios de otros no me cuadran los demás. Este robot al triturar alcanza una velocidad impresionante que dudo mucho que otros lo hagan.
  • Las cremas, los purés, las mezclas para repostería etc, salen muy finas y muy ricas.Es muy cómoda y muy práctica, preparas ingredientes, seleccionas y mientras se hace la comida tú puedes hacer otras cosas.
  • Es muy rápida, nunca pensé que podía hacer algo de repostería con mi hijo tan rápidamente y se agradece. Porque al final él disfruta haciéndolo y no tenemos que llevarnos tanto tiempo en la cocina y  cocinar en ella es muy limpia.
  • Lo que no me gusta es que el vaso tiene poca capacidad y a mí que me gusta hacer comidas para congelar y muchas veces no me quedo corta.
  • Y otra cosa muy importante, es que hay que tener tiempo para darle el uso que se merece si no la vas a tener de adorno al menos durante ese tiempo porque tiene infinidad de funciones y de recetas. Es increíble la de comidas que se pueden hacer con ella.
  • Por último un consejo, si la vas a comprar, antes asígnale un lugar a ella y a los complementos que vienen porque pequeños precisamente no son.

4. Freidora de aire: ¡Ay la moda de las freidoras de aire! Cuánto tiempo me lleve para decidirme por una. Si si, estudio mucho todo antes de comprar algo y sobre todo me llevo mucho tiempo sopesando el beneficio que traerá a mi día a día y si este será o no algo pasajero. La utilizo todos los días, la compré principalmente para hacer los segundo platos de Gonzalo. Está pasando por una mala racha con la comidas que va y viene y estaba friendo mucho, cosa que no me gusta nada, primero por salud y segundo porque es un engorro, todo se ensucia. Por no hablar de los botes para guardar el aceite.

Con la freidora de aire estoy no sucede. Metes la comidas, configuras temperatura y tiempo, a mitad de la cocción paras para remover y a esperar a que finalice.

Y Mientras tú,  te dedicas a lo que te toque hacer ese día o a tirarte simplemente en el sofá a descansar.
A mí me ahorra tiempo y esfuerzo en la cocina así que eso ya para mí es un puntazo a favor de la incorporacion de una freidora de aire en tu vida.

Y aquí te dejo un vídeo de todos esos electrodomésticos de los que te he hablado:

https://youtube.com/shorts/nbver90H54s?si=B4elhF9iH_qbpBZG

¡Y hasta aquí el post de hoy! Con él doy comienzo a una nueva etapa en la que te seguiré contando mucho más.

Nos vemos muy pronto en el siguiente y ya sabes, si tienes alguna duda solo tienes que comentarla justo aquí abajo.

A ver, para que de verdad te sirva este post, te pido que te pongas en situación y visualices todo lo que te voy a contar ahora. No te agobies, simplemente quiero que no te coja de nuevas, y que puedas anticiparte a cualquier situación que llegado el momento te genere estrés o agobio. 

Para llegar a este punto ya has tenido que preparar muchas cosas. Hemos pasado por la habitación del bebé y hablado sobre los muebles más prácticos, hemos tenido que preparar la canastilla, ordenarla y asignarle un lugar a cada producto. Has tenido que buscar el lugar de la bañera y has tenido que colocarla junto con todos los productos de higiene y también has tenido que preparar tus productos de autocuidado para el embarazo, parto, post parto y lactancia, además del botiquín para el bebé.

En definitiva, has llegado al tercer trimestre y ahora ya el cuerpo no nos permite hacer mucho más, así que descansar será tu prioridad.

No me refiero a descansar como sinónimo de estar en la cama dormida, que si te apetece pues también puede ser una opción pero me refiero a estar tranquila, salir cuando te apetezca y a dejar de hacer todas esas tareas que en un principio yo te recomendaba hacer de orden y organización para poner tu casa a punto para la llegada del bebé.

Y ahora si, te voy a contar mi experiencia. Lo que viví cuando llegué a casa con mi hijo y quiero que tengas en cuenta que puedes tener una experiencia muy similiar, por eso te pedía antes que visualizarás esta situación.

 

Mi experiencia en los primeros días en casa con el bebé

Del hospital salí dolorida por el parto y muy confundida con el tema de la lactancia. La primera noche-madrugada, me la lleve en vela con el bebé, si acaso pude dormir un par de horas. Esa mañana cuando me levanté, no recuerdo exactamente la hora pero muy temprano, me senté en el sofá ¿Y sabes qué? que no me volví a levantar hasta las 9-10 de la noche para darme una ducha, la ducha más rápida y estresante de mi vida. 

Mientras duraba, escuchaba a mi hijo llorar, eso quería decir que tenía hambre de nuevo y que me necesitaba. 

Salí de la ducha y me volví a sentar en el sofá. Y así fueron todos los días que vinieron después.

Me sentí agotada por lo evidente, decepcionada porque nunca pensé que esta situación formara parte de aquella maternidad tan ideal que siempre había imaginado y frustrada porque no podía hacer nada más que atender a mi hijo. 

En ese momento no entendí que eso era lo único que tenía que hacer y que lo demás podía esperar. Sin duda alguna ahora lo viviría de otra manera.

Esta es mi experiencia resumida pero real al 100%.

Tres tareas que hacer en el tercer trimestre para empezar la maternidad más relajada

Por eso, quiero que este post lo utilices para que en ese momento tu mente este descargada de toda tarea que no sea estar con el bebé.

Que al menos una parte de tu día a día esté cubierta durante x semanas sin tener que hacerle demasiado caso.

Y si me refiero al tema de comidas. Es evidente que comer tienes que comer, tu y tu pareja. Y hablo de esta parte porque me parece muy importante que antes de que llegue el momento tengas esta tarea bien planificada.

¿Por qué? Por que seguramente sea una de las tareas que mas peso tengo dentro de tu cabeza cuando estés, como te digo, en el sofá sentada sin poder hacer otra casa distinta.

Pensar en que vas a comer hoy, qué necesitas para hacer la comida, si no tienes los ingredientes, ir a comprarlos y después encontrar el momento para poder cocinarlo, pues eso muy estresante pensarlo sentada en el sofa sabiendo que no vas a poder hacerlo.

Así que este post tiene ese objetivo: “ Ayudarte a empezar tu maternidad más tranquilamente para que puedas disfrutarla”

Y sí, soy de las que piensan que el como empieces a vivirla condiciona a tu estado de ánimo y que de él dependerá que la disfrutes más o menos.

Y como se trata de hacer todo lo posible para disfrutar pues allá voy con mis tres tareas para que te sientas mas tranquila.

Por eso vas a poder planificar el momento desde que llegas a casa con el bebé ya en brazos. A continuación te aconsejo que:

  1. Llenes la despensa: Muy importante llenar la despensa con los alimentos que más te gusten, piensa en que tienes que seguir cuidándote pero que ya sí puedes comer alimentos que antes no podías en el embarazo. Ten en cuenta que es una planificación para llevarla a cabo cuando ya te conviertes en madre.Así que, te recomiendo que cojas tu movil, te descarges la app de @myrealfooding de Carlos Rios y que hagas la compra pasando los alimentos por su scaners para que puedas hacer una compra de comidas lo más saludables posibles.
  2. Congeles comidas: Para que no te ocupen tanto espacios los tuppers en la nevera puedes utilizar bolsas de congelación. Ya que tienes que pensar que en el cogelador no solo se meten tuppers si no que también hay alimentos que lo requieren. Así que es una buena opción para ahorrar espacio.Para que no te pegues la paliza haciendo comidas, de lo que vayas cocinado haz de más y congela lo que consideres para un par de platos, de esta forma vas aguardando casi sin darte cuenta y llegado el momento tendrás bastantes comidas de las que poder comer.El para cuánto tiempo cocinar depende del tiempo del que dispongas, depende de lo que cocines normalmente en casa y depende por supuesto del espacio disponible dentro del congelador. Lo ideal sería 2-3 semanas, que os de bastante margen para poder seguir cocinando y congelando para más días, pero si no, pues lo que puedas para pasar la primera semana y media.Lo más importante es que en los primeros días no tengáis que estar pendientes de la cocina.

         3.Deseches todo lo que no utilice o esté inservible: En este caso, no es más que hacer un buen depurado. Ya que estás en la cocina aprovecha para tirar todo aquello que ya no utilices, que no te guste, que esté estropeado. Igualmente, dentro del congelador y frigorífico saca y tira todo lo que lleve mucho tiempo allí y no has consumido. Y en la despensa, lo mismo, revisa los alimentos que quedan siempre detrás y que nunca ves y desecha aquellos que estén caducados.

Es la mejor forma, o al menos el inicio para tener una cocina y una vida allí dentro mucho más organizada. Piensa que esto te dará ventaja a la hora de hacer las comidas. 

Siempre sabrás lo que hay y lo que no, lo que te hace falta comprar y lo que puedes hacer en ese mismo momento sin necesidad de bajar a comprar si no te apetece.

Sé perfectamente que es complicado aconsejarte de que si haces algo vas a estar mejor porque se que de todo esto que te cuento solo se da cuenta una cuando ya está metida en el ajo y antes no le das la importancia que realmente tiene.

Pero si por casualidad tienes familiares o amigas que estén pasando por esto antes que tu, preguntales. Seguro que si no han trabajado en estas tres pequeñas tareas te dirán que tú si lo hagas o simplemente te contarán lo que están viviendo y cómo se están sintiendo ellas, que vendrá a ser pues igual que me sentía yo en ese momento.

Así que mira, estas tareas son muy fáciles y no te van a llevar más de un día en hacerlas, a lo sumo te puede llevar dos si la divides en bloques para dosificar el trabajo, pero no son tareas que requieran mucho tiempo y te aseguro que las ventajas son muchísimas, sobre todo si hablamos del aspecto emocional.

También puede interesarte el post donde establezco un planning de limpieza diaria adaptadas al inicio de la maternidad, y que puedes ir directamente a él haciendo click sobre «Cómo adaptar tu rutina de limpieza diaria a la maternidad: Planning de tareas»

Y vosotras, ¿Qué tal llevasteis esos primeros días con el bebé en casa? me encantaría conocer vuestras historias y seguro que podemos ayudar a otras madres que estén a punto de serlo.

Un saludo enorme, y nos vemos en el próximo post 

 

Tuve tiempo de pensar en qué tipo de cuna quería, no solo para el bebé, sino para mi casa. Al fin y al cabo un bebé duerme bien en cualquiera, y centrarme en lo más cómodo para mi casa fue una opción muy acertada.

Lo más fácil, para hablar de cunas sería enumerar todos los tipos que hay, recomendarte marcas y modelos y que tú ahí, fueras viendo cada una de ellas.

Pero creo que eso no te ayudaría, eso también puedes hacerlo tú poniendo simplemente la palabra «cuna» en google y aquí estamos para dar soluciones. Por eso quiero con este post que te quedes con las alternativas más prácticas, las que se adapten a tu manera de vivir, a tu casa y que desde mi experiencia han sido las más cómodas.

Esto te ayudará a centrarte más en los beneficios que te aportarán a largo plazo, que en sus características y a saber elegir mejor para hacerte la vida más fácil.

Preguntas que deberías hacerte antes de comprar la cuna

De hacerse preguntas lo más importante que puedes sacar son las respuestas. De no hacerlas no vas a conseguir comprar con decisión ni con la seguridad de haber tenido todo en cuenta.Todo esto, si lo que quieres es comprar con cabeza, y teniendo en cuenta tus circunstancias personales.

El universo bebé tiene mucho de bonito pero es muy amplio y a veces, por no decir la mayoría, tardamos mucho en decidirnos porque no sabemos por donde tirar.

¿Cuánto mide? ¿Cabe dentro del espacio donde iría?

Con estas preguntas te obligas a medir el espacio que has destinado para poner la cuna y cuando vayas a buscarla solo tendrás que asegurarte de que las medidas se ajustan al espacio.

¿Cuánto tiempo voy a utilizarla?

Por ejemplo la vida útil de una minicuna no va más allá de los seis meses de vida del bebé. Evidentemente cuando el bebé ya no cabe es el momento de desmontar y decidir qué hacer con ella. Y una cuna grande pues podría durarte unos dos años. 

¿Es convertible? ¿Puedes seguir utilizándola cambiando la posición y convirtiéndola en otro mueble?

Sería ideal o al menos a mí me lo parece, que después de utilizar la cuna o minicuna pudieses darle otra vida, una segunda o incluso una tercera  oportunidad. En estos casos no tienes que pensar qué hacer con ella, simplemente le cambias la posición y le das otra función. Además no solo amortizas al máximo el gasto si no que al final es una inversión.

¿Tengo claro qué haré con ella cuando deje de utilizarla?

A ver, aquí quiero adelantar algo. Todo lo que compres durante el embarazo vas a tenerle un cariño muy especial. Te va a costar mucho trabajo desprenderte de aquello que tu bebé utilizó. Por eso, soy muy fan de adquirir las cosas que me permitan conservarlas siéndome útil hasta el final.

Si no, pues tendrás que decidir cuando llegue el momento si la vas a almacenar, vender, prestar o donar. 

¿Tengo espacio suficiente para almacenar una cuna?

Ten en cuenta que para almacenar una cuna, que no se desmonta al 100%, vas a necesitar bastante espacio, tipo trastero, guardilla, etc.

¿Qué tipo de cuna comprar si tengo poco espacio en casa?

Para mí lo más importante antes de decidir que tipo de cuna de comprar, es pensar y responder a todas aquellas preguntas que se te vengan a la cabeza, a las que te enumero aquí arriba y a las que en base a tus circunstancias sea necesaria hacerte.

Lo que es evidente es que si tenemos poco espacio en casa para almacenar, lo único que podemos hacer con la cuna una vez que dejemos de utilizarla es:

  1.  Prestarla, regalarla, venderla o donarla.
  2. O comprar una cuna que puedas convertir en otro mueble. Esta opción me gustan mucho porque, no tengo que prestarla, ni venderla para dejar en espacio libre y puedo mantenerla en casa sin tener que desprenderme de la primera cuna que utilizó mi hijo. Ya que, como anteriormente te decía, son artículos que nos traen muy buenos recuerdos y que nos gusta guardar, sobre todo también si es tu primer bebé y piensas en darle un hermanito o hermanita en algún momento y aprovecharla de nuevo.

Voy a enumerarte cuatro tipos de maxicunas y minicunas convertibles para que veas mejor de lo que te hablo:

  1. Cunas convertibles en cama: Algunas de ellas son evolutivas y acompañan al bebé desde su nacimiento, pudiendo practicar con ellas colecho y dar el pecho al bebé cómodamente, utilizarla como cuna normal con la barrera de seguridad colocada hacia arriba (en la etapa colecho la barrera se baja) y por último, también como cama. Alargas la vida de la cuna a 4 o 5  años cuando normalmente se aprovecha uno y medio o dos.
  2. Cunas convertibles en escritorio: Son más baratas que las convertibles en camas. No pasan por las mismas etapas que la anterior, pero también son muy prácticas y se aprovechan mucho más que una cuna que no lo sea. Yo tengo una de estas, su diseño es muy bonito, colores muy neutros y dibujos nada recargados. Yo personalmente estoy muy contenta con este tipo de cunas. 
  3. Minicuna convertible con 5 posiciones: Lo primero,¿es necesario contar con una minicuna o puedes pasar sin ella? A ver, yo la tengo. Me hacía mucha ilusión estar en el salón con mi bebé recién nacido,eso sí, dediqué mucho tiempo a buscar una minicuna que pudiera aprovechar el máximo tiempo posible. Ya había leído que se aprovechaban poco por eso quise quitarme el capricho y amortizar al máximo la parte económica.Al final encontré, para mí, la mejor.Una minicuna con un diseño precioso, de madera pintada en color blanco y que podía combinar con todo el mobiliario de la habitación cambiase lo que cambiase en un futuro.La mía tiene 5 posiciones. Esto quiere decir que puedes convertirla en 5 muebles distintos. Puedes convertirla en minicuna  colecho, en minicuna normal, en juguetero (así es como la tengo yo ahora), en escritorio y en sofá pequeño que puedes dejar en su habitación o cuarto de juegos.No he tenido que almacenarla, no he tenido que hacer hueco en ningún altillo, ni llevarla a ningún trastero. Está montada desde antes de su nacimiento y sigue estando en su habitación. No he sentido la necesidad de regalarla ni de venderla para dejar espacio libre en casa, porque ahora también tiene su función y en un futuro no muy lejano también lo tendrá porque a no ser que se me ocurra otra posición, la de escritorio será la que aproveche durante más tiempo.Vamos, te puedo decir, que de todo lo que compré para mi hijo, que no fue mucho, es de lo que más orgullosa me siento de haber comprado.
  4. Cuna convertible en habitación: Las cunas convertibles en habitación son las que usadas como cunas tienen adosado a la misma, el cambiador y varios compartimentos para almacenar, bien sea con cajones o espacios diáfanos.

Cuando llega el momento de convertirla, de ella puedes sacar varios muebles, un escritorio, un modelo con cajones, otro diáfano, además de alargar su medida para utilizarla como cama.

A ver, no está mal,pero no es barata. Las hay de muchos precios pero teniendo en cuenta que tienes que pensar en una habitación de un niño más mayor pues seguramente te replantearás la inversión si o la inversión no. Después de echar un vistazo, las más completas y de mejor calidad suelen rozar los 1000€.

Yo no optaría por este tipo de mobiliario.Primero porque las necesidades que hoy crees tener, sin tener si quiera al bebé en el mundo pueden cambiar de aquí a un par de años. Tus gustos también pueden cambiar, puede gustarte hoy una cuna convertible y el año que viene gustarte más el diseño nuevo que ha lanzado ikea a un precio estupendo y que encima te proporciona mayor practicidad que el que tienes.

Yo no sigo mucho las modas, es verdad que cuando llega una, no encuentras nada más que eso mismo que se lleva y al final acabas por seguirlo pero pienso que antes de seguir tienes que pensar mucho más en tus necesidades reales, esas de tu día a día. 

Yo iría poco a poco, no es necesario pensar en este momento en una habitación de una niño de 4, 5, o 6 años en adelante. Pero también te digo que es esta es mi opinión , según mis necesidades y mi manera de vivir, las tuyas, puedes ser otras ¡Ojo!.

Cunas y minicunas, hay muchas. Si aún no has echado un vistazo ya te adelanto que hay muchisimas, por eso yo solo te enumero las que realmente me parecen prácticas. Para confundirte y hacerte perder el tiempo ya están nuestras búsquedas por internet que aunque son necesarias para tomar decisiones, la mayoría de las veces nos confunden. Si quieres consejo, creo que te vendría genial visualizar por un momento como sería tu día a día con cada una de ellas, tu día a día o tu vida en general, a corto, a medio y largo plazo. Estoy seguro de que te ayudará a elegir mejor y más rápido.

Si tienes cualquier duda sobre la cuna o minicuna que yo utilice o quieres saber más sobre las que te nombro en este post, puedes visitar mi nueva sección «Mis favoritos de Amazon» donde además de tener otros productos, tienes el enlace directo a todas ellas  y  puedas leer todas sus especificaciones, características y valorar los beneficios de cada una de ellas.

¿Cuál de todas te parecen más prácticas?

 

Hoy te quiero contar mi historia y el por qué estoy aquí. Quiero contarte todo lo que viví en tan solo un año, como me afectó, las decisiones que tuve que tomar tras ser madre y cómo conseguí tomar el control de mi vida.

Un año de grandes e importantes cambios

Mi marido y yo somos de un pueblo de Cádiz, Sanlúcar de Barrameda pero por motivos de trabajo vivimos desde hace años en Sevilla.

En Septiembre de 2016, tras años de alquiler y con fecha de boda en Julio de 2017, por fin nos compramos nuestro piso. Un mes después de la compra nos metimos en reformas sin saber que la vida nos tenía preparado un gran cambio para ambos.

En Febrero de 2017, con el piso en obras y sin esperarlo propusieron a mi marido traslado a Tarragona por motivos laborales. Y aunque al principio nos impactó la noticia, decidimos dejarlo todo en Sevilla y aceptar.

En Julio de 2017 tras la boda y viaje de novios, nos mudamos a Tarragona definitivamente y dos días después de llegar me enteré que estaba embarazada. Ni siquiera había llegado el camión de la mudanza con nuestras cosas. Y ahí estábamos, intentando asimilar todo lo que nos estaba pasando.

Mi embarazo fue normal hasta la semana 20 y por descartar posibilidades tuve que someterme a una amniocentesis. La espera hasta recibir resultados fue horrible, un drama, una lección de vida.Un recuerdo que aunque mi mente ha decidido borrarlo, aparece cada vez que tengo que recordar lo importante de la vida. Aún así, para mi mi embarazo fue precioso, fui muy feliz, la experiencia más maravillosa que he vivido en la vida y que volvería a repetir con los ojos cerrados.

La fecha probable de parto estaba fijada para el 1 de Abril, día que me encantaba, no se porque pero me gustaba mucho. Por lo que si no se retrasaba mucho tendría a Gonzalo en vacaciones de semana santa y eso quería decir que nacería en Sanlucar de Barrameda y no en Tarragona. 

Pero claro, como nunca se sabe pues teníamos que estar preparados para que naciera donde naciera tuviéramos todo perfectamente organizado, fuese en Sanlucar o en Tarragona. Dos bañeras, dos cunas, ropa aquí y ropa allí, carro para arriba y carro para abajo. Imagínate, si ya es difícil preparar solo para una casa, para dos ni te cuento. 

Gracias a familiares que nos dejaron cosas que no utilizaban, pudimos preparar su habitación también en Sanlúcar como se merece.

Al final y tal como queríamos, nació en Sanlúcar, cerca de nuestra familia y tras un mes allí tuvimos que volver a Tarragona. Al volver alli tuve que tomar una decisión que jamás pensé tener que tomar, dejar de trabajar para cuidar a mi hijo ( con matricula pagada en la guardería).

El cansancio,las dudas, la preocupación de toda madre primeriza, lactancia muy complicada, solos con el bebé y lejos de familia que pudieran ayudarnos en un momento dado.Todos estos motivos y otros más fueron los que me hicieron decidir dejar el trabajo y centrarme en la maternidad al 100%. Y así lo hice, me dediqué solo a él.

Cuando apenas Gonzalo, mi hijo, cumplía los cuatro meses y cuando mejor estábamos a nivel personal y de adaptación a la ciudad, vuelven a trasladar a mi marido a Sevilla. Otra cambio, otra mudanza, otro impacto a nivel emocional, porque aunque estábamos lejos de la familia, ya habíamos conseguido adaptarnos e imaginarnos la vida allí. Tarragona nos encantaba y sentíamos que apenas habíamos podido aprovecharla. Pero si, otro cambio que teníamos que hacer y esta vez teníamos a nuestro bebé.

Otra vez a organizar cajas de ropa, utensilios de cocina, a desmontar cuna, cama que habíamos comprado en ikea precisamente para el cuarto del bebé, armario también del bebé, bañera y todo lo que no teniamos en la anterior mudanza y que tuvimos que comprar para el bebé.

Toda esta organización con un bebé en casa y sola. 

Mudanza hecha y asentados por fin en nuestra casa. Una casa a medio reformar y que teníamos que retomar y un sin fin de cajas amontonadas para las que tenía que encontrar el momento de poder deshacerlas y buscar su sitio.

No recuerdo cuánto tardé, pero sé que mucho. 

A esto se le sumaba las tareas del día a día y estar pendiente de Gonzalo, que pobre mío era más bueno que todas las cosas. Coincidió también con el inicio de la alimentación complementaria, y eso quiere decir que tenía que hacer comidas para él si o si, porque si no tenía tiempo para hacer la mía pues comía algo rápido y ya está, pero para él si tenía que tenerlas preparadas.

Me sentía agobiada porque tenía que hacer muchas cosas y no llega a nada, irritada porque aunque quería disfrutar de mi bebé sentía que no lo estaba haciendo porque mientras estaba con él tenía en la cabeza todo lo que había dejado a medias y cuando estaba haciendo lo que tenía que hacer iba como un rayo para que me diese tiempo.

Todo esto me frustraba y me agotaba.

Quería cambiarlo, tener un momento para decir: Venga vale, voy a empezar de cero, voy a organizar la casa y voy a empezar a vivir esta etapa disfrutandola. Así era como yo siempre me lo había imaginado.

Cómo conseguí empezar de cero y vivir tranquila

Así que empecé a ver videos, leer libros sobre orden y organización y entonces me di cuenta, que aunque estaba contenta con todas las compras que había hecho porque siempre había antepuesto la practicidad a lo bonito o atractivo en lo que respecta a las cosas del bebé, quizás no había tenido la oportunidad de empezar por lo más importante, organizar antes que nada mi casa para dar la bienvenida a esta nueva etapa y disfrutarla que era lo que yo quería.

Y como se suele decir que nunca es tarde, lo hice. Me deshice de todo aquello que no utilizaba o estaba roto, de todo lo que producía ese estrés en el día a día, ordené y reubique todo en función de mi estilo de vida o necesidad. Prescindí de cosas que en mi casa de Tarragona utilicé porque ya no encajaban con la casa actual.

 Y por fin lo conseguí, conseguí estar más tranquila, conseguí acostarme todas las noches  sin pensar en las comidas o tareas del día siguiente, conseguí sentirme bien conmigo misma y disfrutar de mi hijo y de la vida en general. Al final, conseguí tomar el control de la situación y no dejar que se prolongará mucho más en el tiempo.

Mi consejo para vivir una maternidad feliz

Tengo cuento esto porque es importante que lo sepas, mucho más que contarte que productos y artículos son los más prácticos en relación a tus compras. 

Hay cosas que no se saben hasta que no se viven. Tu puedes saber que tu amiga, que acaba de ser madre está agotada, pero hasta que no vives esa situación no sabes hasta qué punto puede llegar ese agotamiento. Puedes hacerte un idea, pero saberlo de verdad, hasta no lo vives no lo sabes.

Si piensas que estás perdida o sientes que se te hace un mundo y que no sabes por dónde empezar a preparar, comienza por ordenar, por organizar, reubicar, dejar espacios libres y disponible y asignarle a cada cosa un lugar. Te aseguro que si lo haces, todo lo demás vendrá rodado, tendrás las ideas mucho más claras y no dudarás tanto en cada paso que des.

Me di cuenta del papel tan importante que representa el orden en la vida y mucho más aún tenerlo presente y en primera opción en tu lista de tareas al preparar la llegada del bebé. Tener una casa ordenada, es tener ganas de llegar a ella sin agobio, sin pensar en lo que tienes que recoger, limpiar o tirar a diario. Es atender las necesidades de tu bebé sabiendo donde está cada cosa, sin enfados, sin discusión, y reduciendo el tiempo en esos momentos de urgencias en los que cuando se necesita algo se necesita ya, ahora mismo y es poder tener unos hábitos de vida saludable.

Tener tu mente despejada y en paz de verdad que no tiene precio.

No esperes a que esto se convierta en una necesidad, todavía está a tiempo de poner tu casa a punto. Adelántate a todas estas situaciones y emociones que yo sentí en su momento y sé feliz.

Disfruta esta etapa, el tiempo pasa muy rápido y empieza a vivirla con intensidad, sin pensamientos o emociones negativas. Haz todo lo que esté en tu mano para que sea lo más parecido a lo que imaginas.

Si necesitas ayuda puedes preguntarme lo que quieras, estaré encantada de poder poner tus ideas en orden y te daré todas las herramientas que yo utilizo para poder hacerlo.

Y ya que sabes mi historia, me gustaría conocer la tuya. Si te apetece compartirla puedes contarla aquí debajo en comentarios. Seguro que entre todas nos podemos ayudar.

 

Unas de las mayores preocupaciones que las embarazadas tenemos cuando se va acercando el momento del parto es hacer la maleta para el hospital. Seguro que llegado este momento tienes dudas sobre todo lo que tienes que llevar.

Sin embargo, antes de hacerla es importante que tengas en cuenta algunos aspectos para evitar que llegado el momento todo sea un auténtico caos.

Te recomiendo que empieces a prepararla entre la semana 36-37 de embarazo. A partir de esta fecha el embarazo se considera a término, lo que quiere decir que el bebé puede nacer en cualquier momento.

Para tenerla preparada en estas fechas antes tendrás que haberte hecho  con lo que necesitas llevar y para ello, voy a darte unos consejos que te van a servir para el momento previo a la preparación y voy a darte tu lista hecha para que consigas hacer una maleta práctica, útil y ordenada, pues preparar la maleta del  hospital no es hacer una maleta  de viaje e ir metiendo de todo sin sentido. Si lo haces así, al final iras sobre cargada y dificultará tu estancia en el hospital. 

No es complicado, se trata más bien de aplicar la lógica y no perder de vista que vas a un hospital y no a un hotel.

Si aún no has preparado nada y necesitas el primer empujoncito allá van esos consejos que te van ayudar a dar los primeros pasos.

Consejos para hacer una maleta práctica, útil y ordenada.

    1. Hacer una maleta para tí y acompañante y otra a parte para el bebé: Te será mucho más fácil si preparas dos bolsos. Esto te permite tener todo más ordenado, visualizarlo todo a golpe de vista y tardar menos tiempo buscando lo que te vaya haciendo falta en cada momento. Si por el contrario solo preparas una para todos, cada que vez que necesites algo tendrás que removerlo para encontrarlo y al final no encontrarás nada.
    2. Guarda poco a poco las cosas que necesitarás: Lo ideal es que poco a poco vayas guardando en un cajón de tu cómoda o armario lo que vayas a llevarte. De esta forma cuando llegue el momento solo tendrás que coger la maleta y meterlo dentro bien ordenado.
    3. Bolso o mochila cómoda con varios compartimentos: Busca un bolso, a poder ser mejor una mochila que pueda llevar el acompañante a la espalda. Será mucho más cómodo tanto para el momento de llegar al hospital, en el que necesitarás que el acompañante tenga los brazos totalmente libres para ayudarte como para recoger cuando salgáis de allí con el bebé.
    4. Lo que lleves que sea práctico y los productos de higiene y uso personal que sean adecuados: Lleva cosas prácticas, en formato bolsillo para que todo ocupe menos espacios, seguro que de esta forma vas a seguir utilizándolo todo para otros viajes. No pierdas de vista la calidad de los productos, es muy importante que mires siempre la calidad de los mismos para los productos de higiene y cuidado personal. Por ejemplo, en el caso de las compresas, asegúrate de que sean 100% de algodón y si es orgánico mucho mejor. Y con otros productos que lleves que sean aptos, adecuados y recomendados tanto para embarazadas y lactantes.
    5. Separa la ropa de los productos de higienes y otros botes: Hazte con organizadores para guardar la ropa para prevenir que en caso de rotura o apertura de cualquiera de los botes se mezclen y manchen la ropa. Pueden servirte organizadores de viajes.
    6. Dobla la ropa en vertical: Doblar la ropa en vertical te ayudará a mantenerlo ordenado y aprovechar más el espacio.
    7. Enseñale a tu pareja todo lo que llevas dentro de la maleta y por qué: Piensa que después del parto vas a necesitar recuperarte y al menos los primeros días necesitarás ayuda para levantarte de la cama. Es importante que hagas participe de esta tarea a tu pareja para sepa exactamente donde está todo, por qué lo llevas y para que sirve.
    8. Prueba e instala la silla para el coche y asegúrate de que todo funciona correctamente: No te puedes olvidar (aunque no tenga nada que ver con la maleta) de probar e instalar la silla en coche. Si a la salida del hospital vais a volver a casa en coche es muy importante que el bebé haga ese trayecto en la silla de grupo 0 que hayas elegido para su seguridad.

Qué llevar y qué no en tu maleta para el hospital

¡Ahora vamos al meollo de la cuestión! Seguro que te desespera encontrar un hueco para preparar la maleta con todo lo que te hará falta para ese momento. Por eso y para ayudarte he creado una lista con todo lo necesario y que puedes

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Cualquier duda que tengas puedes escribirme. ¡Ánimo! ¡ya queda muy poquito para verle la carita a tu bebé!

Espero haberte ayudado y que te haya sido útil 😉

Que un bebé te cambia la vida por completo es una verdad como un templo.Tengo que reconocer que me asusté. En ese momento recordaba como me imaginaba que sería ser madre cuando por la calle me cruzaba con una mamá con un carrito y en cómo de diferente la estaba viviendo yo.

Resulta que llegas a casa con tu bebé, te acomodas  y es entonces cuando empieza el periodo de adaptación. Una adaptación en todos los aspectos de la vida. Tú con el bebé, el bebé a tí, tu pareja con el bebé, tú y tu pareja entre vosotros, vosotros con la nueva rutina en casa. 

Una rutina que acaba siendo caótica por ese pensamiento de tener que llegar a todo y que ningún favor nos hace. Tener que llevar toda la casa hacia delante como si eso nos viniese impuesto en algún documento.

Es falso. No creas a quien te diga que tener la casa reluciente es lo más importante. No lo es, es importante que esté recogida pero no que esté reluciente. Lo importante en este momento y por encima de todo es la atención y cuidado de ese bebé que acaba de llegar a tu vida y que tanto os necesita. Y por supuesto disfrutar el máximo posible de esta etapa porque como en cualquier otra, cuando pasa ya no vuelve.

No lo intentes, es imposible llegar a todo. Si ya lo es en una vida sin hijos, con ellos muchísimo menos.

Hoy quiero adelantarte algo. Y quiero hacerlo porque sé que en cualquier momento vas a necesitarlo. Llegará ese día en el que ya “recuperada”del parto quieras levantarte y empezar a hacer esas tareas que normalmente antes hacía para poner la casa en orden.

En ese intento te vas a dar cuenta que no vas a poder dar cinco pasos seguidos sin que el bebé reclame tu atención. Y esto te sucederá cada día y la mayor parte del tiempo.

Al final, esta sensación de quiero aspirar y no puedo, quiero limpiar el baño y tampoco o necesito hacer de comer y es imposible, va a crear un sentimiento de culpa y frustración

Culpable porque no puedes terminar lo que has empezado y culpable porque cuando estás con el bebé estás pensando en todo aquello que te falta por hacer.

 Por eso, en este post voy te voy a dar tres claves para ser más productiva en casa cuando llega el bebé para que puedas disfrutar de la maternidad como se merece y que puedas llevar un dia a dia organizado y ordenado. Tendrás un planning que puedes coger como ejemplo para tu rutina diaria de limpieza.

 

Tres aspectos claves que tienes que tener en cuenta a la hora de organizarte en tus tareas diarias con un bebé 

 

  1. Ser consciente de la etapa que estás viviendo. Etapa en la que cambian tus prioridades, tiempo de descanso, horas de sueño. Haz caso a esa típica frase que seguro te han dicho de “ duerme cuando el bebé duerma”. Si necesitas dormir hazlo y si otro día mientras el bebé duerme quieres aprovechar para hacer aquello que tienes pendiente hazlo también.
  2.  Sé flexible. Antes de planificar tus tareas diarias semanales ten en cuenta que en ese intento por hacer habrán muchas interrupciones, imprevistos que te harán posponer aquello tuvieses planificado. En estos casos, acepta que las cosas vienen como vienen y que lo mejor es puedes hacer es adaptarte. 
  3. Haced equipo en casa. No te puedes imaginar hasta que punto es importante hacer equipo con tu pareja. En los primeros días o meses con un simple acuerdo entre vosotros en el que os comprometeis en que cuando uno esté con el bebé, el otro hará otro tipo de tareas como puede ser planificar comidas y prepararlas, es suficiente. Sin estrés, sin agobios y con tranquilidad. Tienes que disfrutar.

Una vez definidas las tres claves más importantes que serán la base de tu nueva planificación en las tareas diarias domésticas voy a mostrarte un ejemplo que puede ayudarte a mantener el orden.

 

Planning diario para una limpieza rápida que te permitirá mantener el orden en tu día a día sin agobios.

El planning diario que te muestro no contempla una limpieza profunda del hogar. Es una planificación para una limpieza sencilla, rápida pero eficaz para que te sea más fácil terminar cada una de las tareas en caso de interrupciones o imprevistos y para que toques o toquéis (en pareja)  todas las áreas de la casa.

Te explico como puedes aplicar este planning de tareas como parte de tu rutina diaria de orden y limpieza.

  1. Despierta por la mañana, tómate el tiempo que sea necesario para dar la toma al bebé, ya sea de pecho o biberón. Mientras, ventila la habitación donde no te encuentres con el bebé.
  2. Cuando encuentres un momento y puedas dejar al bebé dormido o en la hamaca, haz la cama, dobla pijamas y pasa la mopa. Ambienta la habitación con buen olor (preferiblemente hecho por tí, con productos que no sean tóxicos).
  3. Pon una pequeña lavadora con una duración media para que limpie pero que no dure una eternidad y con ropa suficiente pero no llena completamente con el objetivo de que cuando termines el tour de limpieza haya terminado el lavado y puedas tenderla. La intención de no llenar la lavadora con demasiada ropa es por un lado que no te lleve mucho tiempo tenderla, que cuando se seque no te lleve mucho tiempo doblarla y que si tienes que tienes que dejar ropa pendiente de planchar que no se almacene grandes cantidades.
  4. Recoge y mete en el lavavajillas platos, vasos y utensilios de cocina sucios, de la cena o del desayuno. Si está el lavavajillas lleno programalo y si no espera en las próximas comidas para hacerlo. Limpia la encimera, la mesa si la tienes y pasa la mopa. 

Aprovecha que estás en la cocina para sacar del congelador el almuerzo y cena para ese día. De esta forma ya tendrías planteada la comida y una preocupación menos.

  1. Pasa al salón, sacude el sofá, ordena cojines, limpia la mesa, pasa la mopa y echa ambientador.
  2. Pasa al baño. Primero desinfecta el WC y deja que el producto actúe. Mientras limpia el lavabo, (mampara, plato de ducha o bañera puedes darle un limpiado rápido pero también puedes dejarlo para cuando limpies el baño en profundidad). Cuando termines, limpia el WC retirando el producto, pasa la mopa y deja buen olor pulverizando el baño con ambientador.
  3. Solo quedaría esperar a que la lavadora terminase para tender la ropa. Cuando la tiendas, se seque y recojas, separa la ropa y dobla la que no necesite planchado y la que sí déjala doblada también y guárdala en un lugar donde no pueda coger polvo hasta que encuentres el momento de poder plancharla.
  4. Muy importante utilizar guantes y productos de limpieza que no contengan químicos tóxicos. Lo primero por si tienes que dejar rápidamente lo que estés haciendo para coger al bebé y lo segundo por razones obvias. 

Tengo que recordarte que es normal si entre tareas tienes que parar por atender a tu bebé, para y reanuda cuando puedas. No pasa nada. Como ves son tareas que requieren muy poquito tiempo pero que tocan todas las estancias de la casa

Y ahora pensarás, ¿Cuándo limpio el polvo, plancho o limpio en profundidad el baño?

Estas tareas podrías agendarlas como tarea semanal. Es decir, elegir un día de la semana para hacer tareas tipo:

  1. Limpiar el polvo, 
  2. Limpiar en profundidad el baño (no debería estar sucio porque lo has estado manteniendo durante toda la semana). 
  3. Planchado rápido.
  4. ó cambiar las sábanas.

 

El objetivo es que poco a poco introduzcas pequeños cambios en tu rutina diaria de limpieza que te haga sentir mejor y que te permita disfrutar de la maternidad sin agobios.

 

Recuerda la base de esta planificación, ser consciente de estar empezando una nueva etapa con unas prioridades distintas, por eso en cuanto a limpieza y orden se refiere tienes que ser flexible y aceptar cambios en dicha planificación y tercero pero no menos importante acordar en pareja el reparto y distribución de las tareas.  

 

¿Qué te parece el planning como propuesta?

 

En este post vas a poder crear tu propia lista teniendo como base la que te voy a mostrar con la intención de que vayas preparando tu canastilla de calidad y sin derroches innecesarios.

Todavía recuerdo cuando empecé a recibir todos esos regalos hechos a mano que mis tías cosieron especialmente para mi hijo. Verdaderas obras de artes, créeme. Una pena que crezcan tan rápido y no puedan lucirlo más.
Qué ilusión me hizo poder ir juntando todos esos regalos con los que yo iba eligiendo e ir ordenándolos en su armario. Muchas veces cuando abría la puerta me gustaba imaginar mi vida como si en ese momento ya estuviese aquí.

Cómo se que tu sentirás lo mismo quiero que el tiempo que estés leyendo este post te lo tomes como tiempo de relax, tiempo para ti, para imaginar a tu bebé, para sentirlo, para que acaricies tu barriguita una y otra vez y para que disfrutes preparándole la mejor bienvenida que pueda tener.

Ha llegado el momento, si. Después de meses pensando que aún era pronto, por fin puedes hacerlo. Esa canastilla con textiles que dan ganas de achuchar en muy poquito tiempo tendrá su lugar en casa. ¿Cuándo empezar a prepararlo? Te aconsejo que empieces con la canastilla entre la semana 30-34, de esta forma evitarás derroches que como ya sabes no soy muy fan de ellos.
Así que ponte cómoda y vamos a ello. A continuación veremos qué productos, cómo tienen que ser, y qué cantidad te hará falta para que consigas preparar una canastilla segura, práctica y natural.

Qué productos, calidad y cantidad a incluir en tu canastilla 

Conjunto de primeras puestas y ropa de vestir
Los conjuntos de primeras puestas en los que se incluyen prendas de dos piezas, gorritos, guantes y polaina o ranita y patucos, según estación del año en la que va a nacer el bebé, son perfectas para empezar a preparar la canastilla.
Son conjuntos muy completos con complementos muy necesarios para esos primeros días, super cómodos y prácticos tanto para tí como para el bebé, porque llevan apertura delantera para facilitar el cambio de ropa del bebé.
Si me sigues por redes sociales, especialmente en instagram, ya sabrás que no todos los tejidos son válidos para estos sets. Se recomiendan que estás prendas tan en contacto con la piel del bebé estén fabricadas en algodón 100% natural y orgánico.


La razón es importante, porque otros tejidos pueden provocar alergias e irritaciones en la piel delicada del bebé. ¿Y para qué arriesgar si ya tenemos la respuesta?
Normalmente las marcas que fabrican este tipo de tejidos están comprometidos tanto con la salud para lo que puedes siempre buscar el sello OEKO-TEX Standard 100 y que sean ecomarcas comprometidas con el medio ambiente. Si encuentras una de ellas en la que se describa como ecofriendly estás ante la mejor alternativa.
¿Qué cantidad tienes que preparar?
Las primeras puestas son prendas muy cómodas que puedes utilizar tanto para estar en casa como para salir a dar un paseo. Algunas marcas, no todas, tienen disponibles conjuntos de primeras puestas en 3 tallajes distintos. Así que si te gustan, estoy segura que si, sepas que puedes repetir hasta agotar el máximo de su tallaje.
Te aconsejo que en principio prepares unos 2 o 3 conjuntos de primeras puestas para tener siempre de repuesto cuando la del día anterior esté para lavar. Así que de momento y alternando estas primeras puestas con las demás ropita más arreglada (pero cómoda) es suficiente.

En cuanto a las prendas de vestir, y para no llenar el armario de ropa que no sabes si vas a poder estrenar prepara unos 5 0 6 conjuntos y ten en cuenta por supuestos la calidad de las mismas, la talla del bebé y los regalos de los familiares. De ahí que te aconseje principalmente prudencia porque de verdad que da mucha pena tener tanta ropa y poco días para lucirla. Se quedará pequeña en poco tiempo y apenas habrás podido utilizarla tres veces.

Bodys
Siguiendo la misma línea que el caso de las primeras puestas, los bodys para recién nacidos y para mayor comodidad deberán tener apertura delantera para que facilite los cambios ropa, pañal y curas del ombliguito. E igual que en el caso anterior, se recomienda que esté fabricado con algodón 100% natural y orgánico y que cuente con certificado OEKO-TEX Standard 100 para asegurarte que el bebé no esté en contacto con sustancias químicas.
¿Qué cantidad te hará falta preparar?
Para empezar con unos 5 o 6 bodys como mínimo de talla 0 será suficiente, una vez que el bebé nazca y vayas viendo su ritmo de crecimiento irás sabiendo cuándo cambiar a una talla mayor, que será muy pronto y la cantidad con la que tendrá que hacerte con la siguiente talla.

Arrullo
El arrullo es super útil. Aunque lo empieces utilizando con el bebé recién nacido podrás seguir haciéndolo cuando el bebé crezca .Podrás llevarlo siempre en el carro para tapar al bebé ya sea en invierno o en verano. Nunca se sabe dónde puedes acabar entrando (ahora en muchos sitios no, pero crucemos dedos para que todo vuelva a ser lo que era).

El arrullo es una especie de mantita con el que poder envolver, proteger, tranquilizar y adormecer a tu bebé.
Se recomienda de manera muy especial que el tejido con el que esté fabricado, como en otras prendas, sea en algodón 100% natural y orgánico. Además de las razones que ya te he comentado en apartados anteriores, que el arrullo esté fabricado en este tejido hará que el bebé mantenga su temperatura corporal, algo muy importante a tener en cuenta y que explico en el post de Termorregulación del bebé recién nacido y que te interesará saber.
Por supuesto y para curarte en salud, certificado OEKO-TEX Standard 100 siempre.
¿Qué cantidad tienes que preparar?
Con uno para empezar es suficiente. Aunque sea muy útil y siempre sea bueno tener de respuesto te aseguro que como regalo podrá caer alguno más. Y si no, siempre podrás adquirirlo después, cuando creas de verdad te hace falta.

Muselinas
Vamos a por las famosas muselinas. Seguro que al principio te ha costado saber qué era una muselina. Pues si, una muselina no es otra cosa que una gasa de toda la vida. Es un trocito de tela fabricado en un tejido fino y ligero. Lo puedes encontrar en diferentes medidas y tiene infinidad de usos.

Lo puedes utilizar para:
1. Arropar al bebé
2. Secar las babitas
3. Secar la boquita y quitar restos de leche tras las tomas
4. Para tapar al bebé en el carrito o quitarle el sol
5. Para el cambiador ya sea en casa o fuera de ella

Además las muselinas son de estos productos multiusos que tardarás mucho en soltarlo, yo las utilizo ahora que mi hijo tiene tres años para los moquitos y siempre siempre llevo al menos una en el bolso.
El tejido ideal para fabricar las gasas es el algodón o en bambú o en una combinación de ambas. Las dos son buenas opciones, el algodón porque son más ligeras y dan calor y el bambú porque tiene propiedades termorreguladoras que hace que el tejido sea más fresquito en verano. Por eso una mezcla entre ambas es una buena alternativa.
¿Qué cantidad de muselinas es preciso preparar?
No hay una cantidad suficiente y aconsejable. Es decir, te diría que cuantas más mejor.

Pijamas
En el caso de los pijamas, busca las mismas características que para primeras puestas y body. Hay muchos modelos y muchas marcas, pero no todos facilitan el cambio de prendas del bebé, por eso puedes encontrar pijamas que en vez de apertura delantera sea trasera lo que hace más complicado los cambios sobre todo cuando son recién nacidos y andamos con tanto cuidado al manejarle.
No lo olvides, 100% algodón natural y orgánico y que cuente certificado OEKO-TEX Standard 100 si quieres que tu canastilla sea natural.
¿Cuántos pijamas tienes que preparar?
Con unos 6 pijamas de talla 0 puedes apañarte hasta que el bebé crezca, y tengas que buscar una talla mayor.

En cuanto a textil se refiere, considero que con estas cantidades tienes una canastilla lo suficientemente completa como para esperar a conseguir prendas de una talla más grande.

Productos a incluir en tu canastilla si no los has incluido en otro momento

En este apartado voy a lo seguro y que te recomiendo al 100% porque son productos en los que yo confio. Así que además de recomendarte cantidades también conocerás la marca que por experiencia te recomiendo.
Decirte que voy a incluir los productos de higiene y cuidado que quizás los tengas ya si lo hiciste cuando preparamos la hora del baño del bebé y que puedes leer en el post «Hora del baño: Organizar, preparar y ordenar» .
Si en su momento no lo hiciste también tendrás que incluir:

Una unidad de Gel y champú- Weleda
Una unidad de crema para cambios de pañal-Weleda
Una unidad de esponja Konjac natural, marca Acorelle
Una unidad de baño de crema-Weleda

Todos ellos de la marca Weleda, un gran descubrimiento desde que nació mi hijo. Fue un regalo y desde entonces no he dejado de utilizar esta marca. Su productos son 100% naturales y ecológicos, sin tensioactivos fuertes, sin químicos y con sello de calidad Natrue, certificado más estricto a nivel internacional en cuanto a los controles que se exigen para productos naturales y ecológicos.
También puedes utilizar bálsamos naturales y ecológicos o aceite de almendra dulces para hidratar la piel del bebé. Esto aceites vegetales poseen propiedades muy nutritivas que aportaran hidratación y suavizad sin perjudicar la piel.
No es necesario que prepares 2 o 3 botes de cada, cuando se vayan acabando repones sin problemas y no tiene que suponer un desembolso económico tan elevado. Lo importante es que lo que prepares sea de calidad y que de verdad cuide la piel del bebé.

1 kit de manicura con tijeras, lima y cortauñas.
1 cepillo y peine
Un par de chupetes

2 paquetes de pañales de la marca Pingo. Lo ideal con los pañales es ir poco a poco, ver como evoluciona el bebé en peso y altura y en función de su crecimiento ir añadiendo o la misma talla u otra mayor. Es muy típico que se queden pañales sin usar, y hazme caso, da un pelin de rabia. ¿Por qué Pingo? La razón es muy sencilla son pañales ecológicos que han alcanzado las mayores puntuaciones en los controles de calidad y que son los que de verdad cuidan la piel del bebé evitando que estén en contacto con sustancias químicas que normalmente contienen los pañales de marcas convencionales. Si quieres saber más sobre pañales tienes un post en el blog La guía practica para elegir los mejores pañales, ahí profundizo más sobre este tema.

Paquetes de toallitas de la marca Pingo.  En este caso, no funciona igual que con los pañales. Las toallitas no se quedan pequeñas, al revés es imprescindible tener en casa cuantas más mejor, porque desde que nazca hasta no se sabe cuando tendrán que acompañarte haya donde vayas. Elijo Pingo porque de momento son las únicas que conozco que no contienen químicos como el fenoxietanol, parabenos o ftalatos y que si lo contienen casi todas las marcas de toallitas que existen en el mercado. Además sirven para culete, manos y cara, no todas puedes utilizarlas para lo mismo.

Si en algún momento te hace falta algo, siempre puedes hacer pedidos online, así que no tienes de que preocuparte.

De esta forma y teniendo en cuenta el tiempo que hará en el momento del nacimiento, la talla del bebé en el momento de su nacimiento y según su evolución, los regalos de los familiares y amigos que serán muchos y que la mayoría de las veces será ropita, tendrás una canastilla completa, útil, natural y sin derroches.

Si tienes dudas, estás un poco perdida que suele pasar o no tienes tiempo, tienes una sección donde podrás organizar y preparar una canastilla completa y natural con el objetivo de facilitarte la tarea. Siempre podrás escribirme al correo info.mamiplanner@gmail.com  o escribiéndome desde el la página de contacto, si en algún momento necesitas mi ayuda. Estaré encantada de ayudarte en lo que necesites.

Espero que leyendo este post te hayas relajado y hayas podido disfrutar creando tu propia lista y te haya servido.

Siempre puedes escribirme lo que desees en comentarios.

Conoce los sellos de calidad que deberán tener los productos de tu canastilla para que puedas completarla de manera saludable y segura.

Siempre lo digo: “Preparar una canastilla no es difícil, lo difícil es hacerlo con los productos adecuados”. Con esto quiero decir que para mí, todos no lo son y para que lo sean tienen que contar con un respaldo que ganen mi confianza.

Esto es, que cuenten con sellos de calidad que certifiquen aquella promesa por la que sale un producto al mercado.

Puedes ir completando tu canastilla con los productos que tu entorno te va recomendando o puedes implicarte más e ir haciéndola con los productos y artículos que tú, tras investigar certifiques que son los mejores.

Yo tuve muchas dudas. No entendía por qué tanta diferencia y variedad en los precios. Si una marca de toda la vida que se anuncia en la tele cada dos por tres tiene un precio muy inferior a otra que no se anuncia y que por lo tanto no conoces ¿A que se debe?.

No sé por qué, pero mi mente asociaba el anuncio de una determinada marca con la calidad y al revés. Y estoy segura que si te pones a pensar a ti igual también te ocurra.

Evidentemente y según lo que he podido averiguar y sacar en conclusión, es que la diferencia entre precios está en la calidad.

Una invierte en marketing y publicidad televisiva no haciéndolo en la calidad de su formulación, ni tampoco en obtener cierto reconocimiento a través de los sellos de calidad.

Y la otra, la que no se anuncia en la tele, ha preferido invertir en la calidad de su formulación incluyendo de esta manera ingredientes naturales que son más caros desde su cultivo, extracción y modo en que se produce y además se ha preocupado de contar con certificados que respalden su calidad.

Esta conclusión me ha costado mucho tiempo llegar a ella, no te voy a mentir. Han sido muchas horas investigando y preocupándome por dar lo mejor a mi hijo.

Por eso, porque sé que hay que invertir mucho tiempo para llegar hasta aquí , quiero hacerte una guía donde relacionarte cada producto con el sello de calidad correspondiente en cada uno de ellos, para que puedas buscarlos en cada producto que quieras añadir a tu canastilla.

A continuación relaciono cada bloque de productos a incluir en la canastilla del bebé con los sellos de calidad más usuales y estrictos que deberías tener en cuenta.

Guía de productos- sellos de calidad en los productos relacionados con la canastilla del bebé.

Textil

Cuando llegue la hora de preparar todo lo relacionado con el textil de la canastilla, es decir, arrullos, mantitas, bodys, muselinas o gasas, primeras puestas, ropita de vestir, sábanas, gorritos, manoplas o pijamas, asegúrate que cuenten con sello de calidad OEKO-TEX Standard 100.

El sello de calidad OEKO-TEX Standard 100 es el más usado en textiles para bebés y niños y es una certificación ecológica a nivel mundial para los textiles y garantiza haber pasado por estrictos controles y pruebas acreditándose que el textil es seguro en cuanto a sustancias químicas nocivas se refiere.

 

Productos de higiene y cuidado para bebés

Para los productos de higiene, el certificado más estricto en cuento a los controles de calidad para productos naturales y ecológicos es el sello Natrue.

Este sello te ayudará a identificar los productos de higiene para bebés orgánicos y naturales.

Es el primero reconocido a nivel internacional para los cosméticos naturales y orgánicos por que es el que fija los estándares más estrictos.

Por eso cuando compras un producto en el que aparece este sello, te aseguras que ha sido formulado con un porcentaje del 100% de ingredientes naturales y orgánicos y además, al menos un 80 % de ellos son bio.

Contar con productos con sello Natrue, tienes la tranquilidad de no estar utilizando ingredientes derivados del petróleo, parabenos, conservantes, perfumes sintéticos.

Además, para ese porcentaje del 100% de ingredientes naturales no se incluye el agua que se les añade a los productos aún siendo natural, si no que la considera como una sustancia neutra.

Esto te asegura el máximo porcentaje posible de ingredientes naturales en los productos certificados con el sello Natrue.

Así que si quieres productos que realmente cuiden la piel del bebé, el certificado Natrue es el más fiable y puedes estar tranquila por que estarás utilizando auténticos cosméticos naturales y orgánicos.

Pañales y toallitas

En la Guía para elegir los mejores pañales y toallitas para tu bebé recién nacido ya te hablé de los ingredientes con los que se suele fabricar los pañales y toallitas de marcas convencionales y que en la medida de lo posible debes evitar.

Hoy para que te sea más fácil identificarlos vas a ponerle cara.

Y como no está demás voy a recordarte que acreditan estos sellos:

Totally chlorine Face: Certifica que los pañales ecológicos se han fabricado libres de cloro y que han utilizado en su lugar agua oxigenada para blanquear la celulosa. Esto quiere decir que además de contaminar menos, estos pañales ecológicos serán más suaves y tendrán mayor capacidad de absorción.

Naturmade Star: Acredita que la energía que se utilizan para fabricar los pañales es 100% renovable y de origen ecológico.

Original Dermatest Excellent: Avala que no producen reacciones en la piel de los bebés.

OEKT-TEX STANDARD 100: Han sido sometidos a un estricto control que garantiza estar libres de toda sustancia química y toxica que en contacto con la piel del bebé sea perjudicial.

FSC: Acredita que la celulosa que con la que se fabrican los pañales procede de bosques sostenibles.

Chupetes

Cuando llegue la hora de elegir chupete, que la mayoría de las veces no lo hacemos,  porque es un regalo que muchos hacen, tienes que tener en cuenta que estos cumplan con la normativa EN 1400 además de cumplir con la normativa establecida para ellos en la Unión Europea.

Esta normativa regula la fabricación y estándares para garantizar por completo la seguridad y salud de bebés y niños.

Las exigencias que tienen que cumplir los chupetes y que tienes que tener claro son que:

  1. Deben haber pasado los controles establecidos en el Unión Europea.
  2. Los chupetes deben ser de una sola pieza y que totalmente prohibido que puedan separarse entre sí evitando el atragantamiento del bebé con una de ellas.
  3. Todos los bordes del chupete deben ser redondeados. Asegurandonos de que el bebé no pueda sufrir alguna herida o corte.
  4. La pieza del chupete que hace de tope con la boca del bebé debe contar al menos con dos orificios de ventilación como mínimo de cuatro milímetros.
  5. Las tetinas deben estar compuesto de un material que sea flexible con una medida no superior a 30 milímetros de longitud.
  6. Dentro del packaging, el chupete debe contener instrucciones así como advertencias sobre el uso del mismo.

 

Estos son los sellos más estrictos que tendrías que tener en cuenta a la hora de preparar la canastilla de tu bebé. El objetivo es que reduzcas al máximo la posibilidad de que sustancias químicas entren en contacto con la piel del bebé y que con todos los productos que a partir de ahora encuentres, te asegures que cumplen con todos los requisitos y sellos de calidad que en cada uno corresponden para más seguridad del bebé y tranquilidad para ti.

Mi objetivo es que prepares la canastilla de tu bebé de una manera segura, natural y rápida. Se que ir buscando todos los productos e ir deteniéndote en cada uno de ellos comprobando que todo se cumpla es una tarea muy engorrosa, y más aún si dispones de poco tiempo para hacerlo como me paso a mí.

Por eso, he creado una sección sólo y exclusivamente para ayudarte a preparar la canastilla tal y como quieres hacerlo.

Puedes acceder a la sección «Packs canastilla para recién nacido» y comenzar ahora a prepararla, donde también contarás con mi ayuda si así lo necesitas.

Para contactar conmigo puedes hacerlo a través de mi correo electrónico info.mamiplanner@gmail.com, escribirme desde el formulario de contacto o incluso por wasap.

Te animo a que te suscribas a mi newsletter donde además de obtener La Guía práctica para madres primerizas totalmente gratis, obtendrás un 5% de descuento en tu primer pedido acumulable también a otros descuentos que vayan saliendo en la tienda.

Además, me encantará regalarte a través de este medio todo lo que tengo preparado para ti.

Solo espero haberte ayudado un día más y verte por aquí de nuevo en el próximo post de mi blog.

Si tienes alguna duda déjamela en comentarios y estaré encantada de responderte.

Conoce los cuatro productos con los que lavar y tratar las manchas de la ropa de tu bebé sin causarles reacciones alérgicas de manera muy eficaz y apúntate el paso a paso para hacerlo.

 

Estamos de acuerdo en que la llegada de un bebé a casa nos cambia la vida. Nos la llena de felicidad y de buenos momentos. Incluso a veces pensamos como hemos vivido tanto tiempo sin él a pesar del cansancio que sentimos.

Pero también nos la llena de manchas difíciles de quitar. Esa decepción de abrir la lavadora y ver que la mancha por la que la hemos lavado sigue ahí es como haber perdido el tiempo.

Tener que volver a lavar la misma prenda cuando tienes una montaña de ropa pendiente esperando, es volver a empezar de nuevo una tarea que debería estar acabada.

Repetir una tarea al final nos hace tener que posponer las que venían detrás y con un bebé en casa si lo podemos evitar mejor. Por eso es bueno conocer todos los trucos y consejos de antemano y que nuestro día a día sea más tranquilo, llevadero e intentar que todo fluya lo más rodado posible.

Aunque es un tema que no parece importante en principio, lavar la ropa del bebé de manera adecuada es fundamental para prevenir irritaciones y reacciones alérgicas que causan la ropa lavada con detergentes que contienen productos químicos.

Por eso tienes que saber que no es recomendable cualquier jabón. Los productos que solemos utilizar para limpiar nuestra ropa contienen colorantes, aromatizantes, ácidos e ingredientes químicos que más allá de las reacciones alérgicas también pueden contribuir incluso a la aparición de problemas respiratorios.

Estamos acostumbrados a hacer un uso excesivo de los suavizantes porque nos empeñamos en que la ropa huela bien y creemos que si no es así es porque la ropa no está limpia.

El suavizante además de estropear el tejido de la ropa lo que hace, como te decía antes, es contribuir a que aparezcan alergias y otros problemas de carácter respiratorio.

Por eso en este post voy a darte algunos consejos para tratar la ropa del bebé, vas a conocer cuatro productos naturales con los que lavarla y quitar las manchas, el paso a paso para hacerlo y los detergentes más usado aptos para bebés.

 

Consejos para tratar la ropa del bebé de manera delicada

  1. Lava la ropa del bebé antes de usarla: Lo primero que debes saber es que antes de usar la ropa debes darle un lavado, aunque sea cortito. De estos programas cortos de 15-30 minutos que algunas lavadoras tienen.
  2. Separa la ropa sucia del bebé de la ropa sucia vuestra: Se recomienda separar la ropa del bebé de la ropa sucia de los demás adultos de la casa porque de esta manera se evitan posibles transmisiones de bacterias. Hay quién recomienda separar la ropa del bebé de la de los adultos de la casa mínimo hasta los seis meses y hay quién lo hace hasta un mínimo de tres años. Mi hijo tiene tres años y aún la sigo separando y de momento quiero seguir haciéndolo. Yo por ejemplo tengo en su cuarto un cesto de mimbre donde voy guardando su ropa sucia hasta su lavado y la nuestra en un bombo de la ropa sucia normal en el lavadero.
  3. Utiliza jabones neutros o específicos para bebés: Cualquier jabón no vale. La piel del bebé es muy sensible y aún no tiene la misma inmunidad que pueden tener niños más mayores. Y aún siendo más mayores mi consejo es que sigas utilizando detergentes suaves, incluso puedes utilizarlos también para limpiar vuestra ropa.
  4. Si lavas las prendas en la lavadora hazlo en programas delicados: Para lavar la ropa tienes dos opciones. Una de ellas es lavarlas a mano y la otra es en la lavadora. Está claro que ésta última es más rápida, pero ten en cuenta qué si necesitas quitar manchas de caca, vómitos o restos de comidas cuando ya comience con la alimentación complementaria, si quieres que la mancha salga y sea más eficaz el lavado en la lavadora, primero tendrás que tratarla a mano. Si la prenda no tiene manchas puedes meterla directamente en la lavadora siempre en programa delicado para conservarla bien.
  5. Sécalas al sol. Sobre todo si son blancas porque ayuda a desaparecer las manchas. Pero si tienes secadora, la ropa no tiene manchas y quieres ahorrar tiempo utilizalá.
  6. Una vez lavada y puesta a secar, comprueba que esté seca completamente. Es importante que nunca guardes la ropa húmeda porque puede dar lugar a hongos, bacterias o moho.
  7. Planchar las prendas del revés. Se recomienda planchar la ropita del bebé dadas la vuelta porque se dice que ayuda a disminuir microorganismos. Comprueba que la plancha esté limpia para que al planchar no manche la ropa.

 Alternativas más naturales para quitar las manchas y blanquear la ropa del bebé sin utilizar lejía.

Nunca he utilizado lejía para tratar las manchas profundas de la ropa blanca de mi hijo pero sé que hay gente que si lo hace. Por mucho que después pase la ropa por la lavadora no me gusta utilizar este tipo de productos ni para quitar las manchas ni para blanquear la ropa.

Antes te comentaba que no vale cualquier jabón o detergente pero si tenemos que utilizar productos que sean potentes con las manchas, delicados con los tejidos y delicado por supuesto con la piel del bebé.

Por eso ahora te voy a enumerar cuatro productos que puedes utilizar para tratar las manchas y dejar las prendas blancas de la manera más natural:

  1. Percarbonato de sodio: El percarbonato de sodio es biodegradable (no lo confundas nunca con el perborato de sodio, ya que éste no es biodegradable y contamina) y se suele utilizar muchísimo en la limpieza del hogar bien sea para lavar la ropa o el baño. Tiene propiedades desinfectantes, quitamanchas y blanqueantes. Es un producto muy eficaz que sustituye a todos los que utilizamos normalmente y se usa mucho para lavar la ropa de bebés y niños. Lo puedes utilizar tanto para hacer un lavado previo a mano para tratar las manchas más difíciles y en la lavadora. Lo mejor de todo es que lo puedes encontrar en cualquier supermercado y que aunque se utilice para quitar las manchas en la ropa blanca, también lo puedes utilizar en la ropa oscura y de color, porque no la va a decolorar.
  2. Vinagre convencional o de limpieza: El vinagre convencional o de limpieza se utiliza para dar suavidad y brillo a la ropa además también elimina olores. Por lo que sustituye al suavizante que se suele utilizar.
  3. Ácido cítrico: El ácido cítrico no deja residuos ni provocan reacciones alérgicas al bebé. Por eso, se utiliza como alternativa a los suavizantes convencionales como el vinagre. Una buena alternativa para quitar las manchas es el zumo de limón exprimido.
  4. Jabón de Marsella: Seguro que has escuchado hablar del jabón de Marsella. Hasta que he encontrado todas estas alternativas anteriores es el que he estado utilizando desde que nació mi hijo para tratar las manchas a mano antes de meterlas en la lavadora. La verdad, es que es un remedio muy eficaz, natural y económico. Lo único que tienes que hacer es frotar el mismo jabón contra la mancha y frotar de nuevo con las manos hasta que desaparezca o la deje mínimamente aceptable como para que la mancha se elimine con el lavado en la lavadora.

Elimina las manchas paso a paso con ingredientes naturales

En este apartado vas a ver como puedes lavar y eliminar las manchas mas difíciles de la ropa del bebé paso a paso, con los productos que anteriormente te he nombrado.

Paso 1 Prepara una palangana con agua tibia y añade zumo de limón

En una palangana echa un 1,5 L o 2 L de agua caliente mezclado con unos 100 ml de zumo de limón o vinagre de limpieza. En el caso del zumo de limón puedes exprimirlo o puedes utilizar el que se vende en mercadona u otros supermercados y que viene en botes ya exprimidos. En el caso del vinagre hay quien utiliza vinagre convencional y hay quien lo hace con vinagre de limpieza. Yo utilizo este último. El ácido cítrico o vinagre sustituirán al suavizante que acostumbramos a usar sin dejar malos olores y sin causar reacciones alérgicas.

Paso 2 Añade el percarbonato de sodio

El siguiente paso será añadir el percarbonato de sodio que al entrar en contacto con el agua tibia a partir de unos 40 grados libera oxigeno activo. Lo verás cuando al añadirlo al agua veas aparecer la espuma que será la que esté limpiando y blanqueando la ropa. Aquí también puedes añadir el detergente suave que hayas elegido y dejarlo totalmente sumergido.

Paso 3 Déjalo en remojo mínimo unos 15 o 20 minutos

Durante este tiempo la espuma irá subiendo y si lo crees necesario puedes tratar la mancha suavemente con un cepillito para que el producto entre bien en el tejido. Tras este tiempo las manchas habrán desaparecido.

Paso 4 Mételo en la lavadora

Después puedes meter la ropa en la lavadora y lavarla con el detergente apto para bebés y añadirle en el mismo cajetín dos cucharadas de percarbonato de sodio o directamente en el bombo de la lavadora.

Este paso a paso lo puedes aplicar para tratar las manchas de todo tipo de sustancia y de todo tipo de prendas como bodys, baberos, primeras puestas, polainas, mantas, arrullos y ropa de vestir. Y recuerda que lo mas importante para eliminarlas es actuar de manera rápida. Si en ese momento no tienes tiempo, no te preocupes, déjala sumergida en agua para tratar la prenda más tarde.

Cinco detergentes ecológicos aptos para bebés

A continuación te voy a enumerar cinco detergentes suaves, aptos y ecológicos para bebés. He de decirte que yo solo he utilizado uno de ellos y estoy en proceso de probar otro porque en este momento a mi hijo por dermatitis atópica le viene mucho mejor detergentes para pieles sensibles.

Así que te dejo por aquí la lista:

  1. Biobel: Este es el que voy a empezar a utilizar. Me llama mucho la atención que sea ecológico y con certificado de calidad Ecocert y que esté recomendado además por pediatras y dermatólogos para bebés, adultos de pieles sensibles, atópicas o con otros problemas dérmicos. Tampoco contiene perfumes sintéticos, colorantes, blanqueantes ni ingredientes petroquímicos.Así que cuando lo pruebe te podré dar mi opinión, pero a mi me pinta muy bien. Si quieres verlo puedes hacerlo pinchando aquí.
  1. Flopp. Detergente ecológico en capsulas para la ropa del bebe. Es un detergente líquido concentrado ecológico con ph neutro para la ropa de los bebés y con certificado Ecolabel. Es muy fácil y limpio de aplicar porque viene en formato cápsulas y parece que también es muy eficaz. Te dejo el enlace directo para que puedas echarle un vistazo aquí.
  2. Baby Anthyllis Detergente delicado para la ropa del bebe eco. Este detergente de la marca Baby Anthyllis tiene también muy buen pinta porque no contiene tensioactivos irritantes y los que contienen son de procedencia natural como el aceite de oliva y colza que además son ecológicas. Está comprobado dermatológicamente que no es irritante para la piel sensible de los bebés y tampoco contiene derivados del petróleo, sulfatos, conservantes sintéticos y está libre de alérgenos. Tiene buenísimas opiniones y también quiero probar, a ver que tal va. Tienes el enlace directo al producto aquí.
  3. Norit bebe. Detergente Líquido para ropa de bebé, pieles sensibles y atópicas. Este fue el detergente que yo utilicé porque es el más conocido y en consecuencia el que más se recomienda.También está recomendado por pediatras y dermatólogos, con fórmula hipoalergénica y no contiene tampoco conservantes ni alérgenos. Es verdad que no tiene mucho olor pero ahora que conozco y manejo más estos temas prefiero que no los tenga y para mi es un punto a favor. Si quieres probarlo  aquí puedes echarle un vistazo.
  1. Nuk detergente liquido para la ropa de bebé. Este detergente líquido de la marca Nuk, tiene al parecer una fórmula a base de enzimas naturales que ayudan a eliminar las manchas. Además, es de fácil aclarado por lo que se suponen que no quedan restos de detergentes que puedan después estar en contacto con la ropa del bebé. Es apto tanto para ropa de color como para la ropa blanca. Y este detergente de la marca Nuk puedes verlo pinchando aquí.

Bueno pues hasta aquí el post de hoy, espero que te haya gustado y que te haya servido para ahorrar todo ese tiempo que nos hace falta ahorrar cuando nos convertimos en mamás y papás.

Queda pendiente mi opinión sobre algunos productos que quiero probar y si algunas probáis otros, espero también la vuestra para que tengamos más información.

¿Alguna mamá en la sala que pueda recomendarnos algún producto natura y eficaz para quitar las manchas de la ropa de nuestros bebés? Soy toda oído!

Conoce como regula la temperatura el bebé recién nacido para poder vestirlo correctamente según las circunstancias y estación del año, la importancia de mantener una buena temperatura ambiental y como medirla. De esta manera, podrás hacerte una idea de como vestir al bebé sin tener tantas dudas.

Cuando llegas a casa con tu bebé recién nacido surgen muchas dudas y preocupaciones. Yo llevé muy mal (y aún lo sigo llevando) saber como tenía que vestir a mi hijo según el tiempo, la hora o el momento. Para mí fue muy difícil acertar aún viviendo en Andalucía y con buen clima.

Es probable que empieces a escuchar frases como “abrígalo que hace viento” “Este niño tiene frío” “Tiene las manos frías” ”Si llora es porque tiene calor”. Es más, puede pasar que te encuentres con una persona y te diga que le quites ropa que está pasando calor y que después te encuentres con otra y te diga que se la pongas que está muy desabrigado.

Y tú como madre primeriza vas haciendo y deshaciendo tal cual te van diciendo sin saber por qué. No te lo tomes a mal, tu entorno más cercano te aconseja con la mejor de las intenciones, no lo dudes, pero pueden confundirte.

Así que al menos permítete dudar sobre esos consejos y hacer lo que de verdad como madre consideras. No sientas apuro por hacer algo distinto a lo que te aconsejan ni te sientas en el compromiso de hacerlo si así no lo piensas.

Para que seas tú la que decidas y te sientas más seguras a la hora de hacer o no hacer y teniendo en cuenta que tener estas preocupaciones son muy típicas te traigo un post donde te voy a contar como regulan la temperatura los bebés recién nacidos, como le influye la temperatura del ambiente, con puedes medir y algunos tips para vestir al bebé adecuadamente.

¿Cómo regulan la temperatura los bebés recién nacidos?

La termorregulación es la capacidad que tenemos para mantener la temperatura corporal y se consigue a través de mecanismos que regulan tanto las pérdidas como la producción de calor.

Estos mecanismos equilibran la temperatura de nuestro cuerpo para que ésta esté dentro de rangos normales independientemente de la temperatura exterior.

El caso es que cuando un bebé nace su piel es tan fina y con tan poca grasa subcutánea que aun no tienen estos mecanismos desarrollados, por lo que su capacidad para producir calor está muy limitada y su capacidad para perderlo muy alta.

Por lo tanto, un bebé recién nacido no puede defenderse del calor a través de la sudoración como lo hacemos los adultos o niños de más edad. Ellos regulan mal su temperatura, se enfría y se acaloran muy rápido dependiendo de la temperatura en ese momento y son más sensibles a estos cambios.

Por eso, si escuchas que a los bebes recién nacidos no es bueno abrigarles tanto, se refieren a que puedes sobrecalentarlo.

Un exceso de ropa puede acalorar tanto al bebé que incluso puede provocarle fiebre y deshidratación por una excesiva sudoración.

 

¿Qué temperatura ambiental es la adecuada para un recién nacido ,como medirla y como puede influirle?

Para darle al bebé, y especialmente a un bebé prematuro, un buen cuidado en sus primeras horas o días de vida es importante hablarte del ambiente térmico.

Pero antes me gustaría definir el concepto de “Ambiente térmico neutral”:

 “El ambiente térmico neutral se define como la situación térmica en la que la producción de calor es mínima mientras que la temperatura interna está dentro de los límites normales”

Este concepto surgió cuando se descubrió que proporcionar un ambiente térmico neutral beneficiaba al crecimiento y desarrollo en bebés prematuros.

¿Esto quiere decir que tienes que proporcionar un ambiente térmico neutral a tu bebé recién nacido?No, no es preciso proporcionarlo si tu bebé ha nacido a término, sin embargo, en las primeras horas de vida (en el hospital) sí es preciso mantener una temperatura ambiental de entre 27º C o 28 º C, de ahí que se le ponga el gorrito y manoplas. Cuando llegues a casa con tu bebé podrás mantener una temperatura ambiental de entre 24ºC a 25ºC.

Si quieres asegurarte de que tu bebé recién nacido se encuentra en un buen ambiente con respecto a su temperatura, puedes hacerlo midiéndola en su axila porque la temperatura de esta zona es la primera que desciende cuando se encuentra en un ambiente frío. La temperatura será la adecuada si estuviese entre 36,5 y 37,3ºC.

Medir la temperatura tocando pies y manos no es un buen parámetro porque en bebes recién nacidos siempre están fríos precisamente por todo lo que te he contado sobre la regulación de su temperatura.

Puedes también tocar su pecho, espalda y nuca para comprobar que no esté sudando y que mantiene una temperatura normal.

Tanto si está por debajo como si está por encima de estos valores la temperatura ambiental puede influir en el bebé recién nacido. Se dice que por debajo de 36,5 ºC  el bebé se estaría enfriando y por encima de 37,3ºC sobrecalentando y la temperatura del medio ambiente puede estar teniendo un papel fundamental en estos cambios.

Un bebé recién nacido puede enfriarse cuando:

  1. No se le arropa adecuadamente
  2. Está expuesto a corrientes de aires
  3. En la superficie en la que se le cambia o viste son frías
  4. Se encuentran en lugares donde están en contacto con aires acondicionados

Y un bebé recién nacido puede sobrecalentarse cuando:

  1. Se le arropa en exceso
  2. Está cerca de estufas u otras fuentes de calor
  3. La temperatura ambiental es muy elevada

Tienes que intentar encontrar el equilibrio. Ni desabrigar ni abrigar en exceso porque como se suele decir los extremos no son buenos.

Ocho tips para vestir al bebé adecuadamente

  1. Ropa interior y de vestir de su talla, holgada y cómoda. Que una prenda de vestir o interior sea holgada no quiere decir que le tenga que quedar grande. Permítele que tenga libertad de movimiento y además que esté cómodo evitando que la ropa se le caiga.
  2. En cuanto al tipo de tejido utiliza ropa de algodón 100% natural porque este tejido es transpirable, absorbe mejor el sudor en caso de que sude y no provocan alergias. La mejor opción es la ropita sobre toda la interior en algodón orgánico, porque de esta forma te aseguras que este tejido ha sido cultivado y elaborado sin productos químicos como pesticidas y herbicidas.
  3. Evitar que la ropa de lana esté directamente en contacto con la piel del bebé ya que puede ser irritantes y las que tengan pelos, imperdibles, lazos, cintas o cordones.
  4. Cuando salgas fuera de casa, piensa en que lugar vas a estar. Si vas a estar en lugar cerrado o abierto, con calefacción o si existen corrientes de aire.
  5. Es preferible que lleve ropita interior y ropita de vestir finita por si tienes que ir quitando capas de ropa que al quitar una de ellas no se quede desabrigado y puedas mantener ese equilibrio que intentamos encontrar.
  6. Si la ropa tiene etiquetas interiores descósela con cuidado en vez de cortarlas porque igualmente pueden molestarle si las dejas puestas a que las cortes ya que ese mismo cortado puede rozarle.
  7. Utiliza muselinas y tenlas siempre en el bolso del carrito para los días de verano. Es buena opción para tapar al bebé los pies en noches de verano sin abrigarlo como en invierno.
  8. Puedes utilizar también mantitas de hilo para las noches de verano y no de lana como en invierno.

Entiendo que aun sabiendo como regulan la temperatura los bebés recién nacidos, cuando llegue el momento sigas teniendo dudas. No te preocupes, es normal y tienes que pasar por eso. Poco a poco y utilizando el sentido común estas dudas irán desapareciendo.

¿Conoces algún truco para asegurarte de que el bebé está vestido correctamente? Si ya eres mamá y tienes experiencia cuéntame cuales son tus trucos o tips para que podamos contar también con ellos.